El café etíope tiene un aroma picante y fuerte, redondeado por una acidez media y un sabor intenso y achocolatado. A diferencia de su hermano de Sidamo, este café tiene una ligera acidez, un sabor redondo y un agradable sabor afrutado.
Aroma picante e intenso, redondeado con acidez media y sabor fuerte achocolatado y cuerpo redondeado. Cultivado bajo bosques frondosos Kaffa y Bench Maji dónde se desarrollan proyectos para conservar los ancestrales cafetales de Etiopia.
Este café es excepcional principalmente cuando se toma en espresso o turco.
Valoraciones
No hay valoraciones aún.